sábado, 1 de agosto de 2015

Cómo transformar un neumático en un sillón circular


Existen muchas posibilidades para crear muebles reutilizando neumáticos. Este proyecto requiere un poco más de trabajo, pero el resultado valdrá la pena. Al terminar, tendrás un cómodo y original sillón para descansar en tu hogar.

Materiales:


- Un neumático de camión.
- 4 patas: puedes usar los bloques cuadrados de los palets o cortar cubos de madera de 8 cm x 8 cm x 5 cm.
- 5 vigas de 8 cm x 5 cm.
- Cuero sintético u otra tela que te guste (para la base).
- 1 tabla de madera contrachapada de 9mm.
- 2 planchas de espuma de poliuretano (goma espuma) de 5 cm.
- 1 plancha de espuma de poliuretano (goma espuma) de 1,3 cm.
- Tela para cubrir el sillón.
- 8 tornillos.
- 20 pernos de 0,6 cm con sus tuercas.

Paso 1: Arma el asiento


1. Lo primero que debes hacer es medir el diámetro del neumático y restarle a esa cifra algunos centímetros. Luego, dibuja dos círculos de ese tamaño sobre la madera contrachapada. Marca el centro y, con un lápiz, traza una cruz (+) para dividir la superficie en cuatro. Corta ambos círculos.

2. Coloca uno de los círculos sobre el neumático. Con un taladro, perfora en los cuatro puntos que marcaste al trazar la cruz, yendo desde la madera hacia el neumático. 

3. Levanta la madera, cambia la mecha del taladro por una más grande y vuelve a perforar los agujeros que hiciste sobre el neumático en el paso anterior. Si no haces esto, como la goma se contrae, el perno no pasará bien por el orificio. Tal vez debas ir cambiando las mechas por otras más gruesas y volver a perforar varias veces. Asegúrate de que el perno quepa bien, pero que no quede flojo. 

4.  Coloca un poco de pegamento alrededor de uno de los orificios perforados en la tapa de madera. Pasa el perno a través de él y a través del agujero del neumático. Luego, asegura la tuerca. Haz esto con las cuatro perforaciones.

5.  Sobre la plancha de goma espuma de 5cm, coloca el neumático con su tapa y marca su contorno. Al recortar, deja algunos centímetros de margen.  La goma espuma debe ser un poco más grande que el neumático. 

6.  Cubre toda la superficie de la madera con pegamento y pega la goma espuma recortada en el paso anterior. 

7. Corta la tela. Esta debe ser un poco más grande que la goma espuma, tal como se ve en la imagen de la derecha.

8. Con una engrapadora, fija la tela en su lugar. Te conviene comenzar por las cuatro esquinas, como se ve en la imagen. 

Paso 2: Arma la base


1. Mide el alto del neumático y súmale 10 cm a ese número. Luego, mide su contorno. Corta la goma espuma de 1,3 cm de acuerdo a estas medidas.

2. Coloca la goma espuma cortada sobre el lado del neumático y fíjala en su lugar con la engrapadora. 

3. Marca los sitios donde colocarás las vigas. Para ello, divide la medida del contorno del neumático en dos.  A la medida de una de las mitades, súmale 25,5 cm y haz una marca sobre la goma espuma. Así, quedarán dos áreas delimitadas en el contorno del neumático: una más grande y otra más pequeña.  Divide esta última en cinco para delimitar cinco secciones iguales. Sobre cada una de ellas, marca el ancho de una viga. Luego, recorta la goma espuma de acuerdo a tus marcas. 

4. Ahora deberás cubrir la base con la tela.  A las medidas del alto y el diámetro del neumático que usaste anteriormente para cortar la goma espuma, súmales algunos centímetros . Corta la tela de acuerdo a estos números.

5. Rodea todo el neumático con la tela, asegurándote de que esta quede bien tirante. Cuando hayas completado la vuelta, sujeta la unión con alfileres. Con cuidado, desliza la funda de tela que acabas de crear hacia afuera del neumático y cósela en el sitio que marcaste con alfileres.

6. Coloca la funda cosida nuevamente sobre el neumático, con las costuras hacia adentro. Fíjala en su lugar con la engrapadora. 

7. Corta la tela en  los cinco sitios donde habías hecho los recortes en la goma espuma para colocar las vigas. Pega los bordes de la tela recortada con pegamento caliente para que quede más prolijo.

Paso 3: Coloca las patas


Este paso es opcional. Puedes evitar colocarle patas al sillón.

1. Toma los cubos que vayas a utilizar y, con una regla y un lápiz, marca una “X” yendo de esquina a esquina. En el centro de tu marca, perfora con el taladro para hacer un agujero piloto.

2. Pega un trozo de cuero sintético sobre la base opuesta del cubo, es decir, sobre la cara que quedará apoyada sobre el suelo. Luego,  mide el alto de la pata y corta el cuero sintético de manera tal que te alcance para envolverla por completo. Ten la precaución de dejar algunos centímetros de más, de manera tal que la tela sobresalga un poquito por encima de la madera. Así podrás colocarla más fácilmente. Fíjala en su lugar con la engrapadora. 

3. Recorta un trozo de cuero sintético que sea lo suficientemente grande como para cubrir el segundo círculo de madera cortado en el paso 1. 
  
4. Envuelve el círculo de madera en el cuero sintético y fíja este material en su lugar usando la engrapadora, tal como lo hiciste con la tapa.  

5. Voltea el círculo de madera, de manera tal que la superficie descubierta quede mirando hacia arriba. Con un lápiz y una regla, marca una cruz (+) y perfora cuatro orificios equidistantes, al igual que habías hecho con el primero. 

4. Coloca las patas sobre el círculo. El lado descubierto de los bloques debe quedar apoyado sobre el cuero sintético de la tapa. Atorníllalos usando como guía el agujero piloto que habías perforado en el paso uno. 

5. Coloca el círculo de madera con las patas añadidas sobre el neumático. Perfora cuatro orificios entre las patas, yendo desde la madera hacia el neumático. Fija la tapa de madera en su lugar con tornillos.

Paso 4: Arma el respaldo


1.  Toma una de las vigas y apóyala sobre la base del sillón, en el sitio donde habías recortado la goma espuma. El borde inferior de la vara de madera deberá coincidir con el borde inferior del neumático, como se ve en la imagen de la izquierda. Marca en la viga el espacio que ocupa el recorte. Allí deberás perforar.

2. En el extremo inferior de cada viga, deberás hacer cuatro orificios en el área delimitada por la marca que hiciste en el paso 1. A través de ellos, pasarás los pernos para fijarlos al neumático. Para asegurarte de que todos los orificios queden iguales, te conviene hacer una plantilla sobre un trozo de cartón.  Luego, coloca la plantilla sobre cada una de las vigas y, con un martillo y un clavo, marca los sitios donde deberás perforar. 

3. Perfora los agujeros en la viga. Primero, usa una mecha de 0,6 cm. para atravesar la madera de lado a lado. Luego, toma una mecha que tenga el mismo diámetro que la cabeza del perno y haz un orificio lo suficientemente profundo como para que ésta quepa y no sobresalga de la viga.

4.  Haz una marca a aproximadamente 30 cm de la parte superior de todas las vigas. Allí, taladra un agujero con la mecha de 0,6 cm. 

5. Toma una de las vigas y colócala sobre uno de los recortes que hiciste al armar la base. Con una mecha de 0,6 cm, perfora para traspasar la madera y el neumático. 

6. Quita la viga e intenta encontrar el sitio que perforaste anteriormente. Verás una marca muy pequeña. Toma una mecha más gruesa y vuelve a perforar en el mismo sitio. Ahora deberías poder pasar el perno a través del agujero. Recuerda que necesitarás colocar cuatro de ellos para cada viga, así que deberás hacer esto cuatro veces por viga. 

7. Monta todas las vigas.  

Paso 5: Arma la almohadilla para el respaldo


1. Si quieres un respaldo bien mullido, puedes usar dos trozos de goma espuma de 5cm y pegarlos entre sí. 

2. Para armar la funda, corta la tela de un tamaño tal que cubra bien toda la espuma, por delante y por detrás. Aproximadamente, deberá tener 1,4 x 1,3 m.  Dobla la tela al medio,  cose los laterales y, desliza la goma espuma dentro de ella. 

3. Cuando tengas la goma espuma dentro de la funda, cose la abertura con una costura lo más invisible posible. 

4. Coloca la almohada sobre las varas de madera.  Ten la precaución de que su centro toque la viga del medio. Como la estructura es circular, tal vez debas presionarla ligeramente para lograr esto. 

5. Marca los orificios que habías hecho en la parte superior de las vigas sobre la almohada. 

6. Sobre las marcas que hiciste en el paso anterior, cose unos lazos lo suficientemente largos como para envolver las vigas y atar un moño.

7. Coloca la almohada sobre el respaldo. Pasa los lazos por los agujeros que se encuentran en la parte superior de las vigas. Envuelve estas con ellos y átalos con un  moño.

Cómo hacer botellas mágicas

Esta es una buena idea para reutilizar botellas y crear un hermoso elemento decorativo. Sólo deberás seguir tres sencillos pasos. Además, todos los materiales son fáciles de conseguir, ¡es por eso que también es un excelente proyecto para hacer con niños!

Las botellas terminadas se verán muy bonitas al colocarlas cerca de una ventana o en algún otro sitio donde reciban mucha luz. Agítalas y observa la magia flotar. 

Materiales

- Una botella transparente: si vas a reutilizarla, asegúrate de lavarla y secarla bien antes de empezar. Puede ser de plástico o de vidrio. Es importante que tenga una tapa a rosca o un corcho hermético.
- Agua
- Glicerina: puedes conseguirla en la farmacia. También puedes reemplazarla por aceite para bebé, pero éste no funcionará tan bien. 
- Lentejuelas, cuentas de plástico, purpurina: puedes usar cualquier cosa que brille y sea lo suficientemente liviana como para flotar. Si vas a trabajar con niños, ten cuidado con la purpurina. No los dejes manipularla sin tu supervisión, ya que corren el peligro de inhalarla. Si quieres que ellos hagan el trabajo, será mejor utilizar otros materiales, como brillantina.
- Un lazo para decorar el cuello de la botella (opcional) 

1. Llena la botella con una parte de agua y una parte de glicerina.

2. Introduce la purpurina, las lentejuelas, las cuentas o cualquier otro elemento que hayas decidido utilizar.

3. Cierra la botella y agítala.

Como habrás observado, el proyecto es muy versátil. Puedes probar con botellas de distintas formas y tamaños, con otros materiales y con diversas combinaciones de colores. A los más pequeños les encantará jugar con ellas. Sin embargo, también se verán muy bonitas en una repisa. Otra buena idea es usarlas como souvenir de una fiesta o alguna ocasión especial. En este caso, se pueden hacer tarjetitas artesanales y amarrarlas con un lazo al cuello de la botella.